Relaciones Internacionales y la Política Exterior del Reino de Marruecos

La situación geográfica del Reino de Marruecos, punto de encuentro de civilizaciones, religiones y continentes, hace que su política exterior sea caracterizada por la diversificación de socios, el respeto de la soberanía de los países, su integridad territorial, y la promoción del desarrollo socio-económico en el marco de la cooperación Sur-Sur, patrocinada por su Majestad el Rey Mohammed VI desde su acceso al trono.

En efecto, el Reino de Marruecos se ha involucrado en consolidar primero sus relaciones con los socios tradicionales como son Los Estados de la Unión Europea, los Estados Unidos, los países africanos y el Mundo Árabe, al tiempo que se esforzó en desarrollar las relaciones con los nuevos socios tales como el Estado de Israel (acuerdos de Abraham) o China (en el marco de la ruta de la seda).

Asimismo, El Reino de Marruecos mantienen vínculos sólidos con muchos países de América Latina y el Caribe, que no se entienden solo por el pasado colonial español común (España establecía zonas de protectorado en el Norte y en el Sur), sino que también por una perspectiva de desarrollo Sur-Sur, que permite alcanzar niveles de progreso en muchos aspectos donde nuestros países respectivos son complementarios.

Esos vínculos no se limitan en la cooperación bilateral, y se extienden a los organismos regionales como son la Alianza del Pacifico, El CARICOM, la Organización de los Estados Americanos, el Sistema de Integración Centroamericano y la Conferencia de los Estados Iberoamericanos.

En el marco de la diplomacia parlamentaria, Marruecos es un socio de organismos representativos regionales como el Parlatino, el Parlacen o el Parlandino, y se perfila también como actor clave del dialogo parlamentario Sur-Sur. Rabat fue sede recientemente de un Foro de diálogo de los parlamentos africanos, árabes, latino-americanos y caribeños.

En el marco económico, el Reino de Marruecos registra importantes intercambios comerciales con los países latinoamericanos y caribeños que incluyen productos agrícolas, mineros, automovilísticos, así como fertilizantes. La cooperación económica se intensificó últimamente con la inyección de inversiones directas en ambos sentidos, beneficiando de las facilidades logísticas y aduaneras, y que no responden exclusivamente a fines lucrativos sino también a iniciativas solidarias.

El Reino de Marruecos se presenta también como socio clave a nivel de seguridad, consolidando la cooperación con países como México, Brasil, Argentina y Colombia en la lucha contra el tráfico de estupefacientes, el tráfico de armas, el terrorismo y el blanqueamiento de dinero.

El Reino de Marruecos posiciona al respeto del derecho internacional como principio fundamental de su política extranjera y considera la integridad territorial y la soberanía de los países factores imprescindibles para la estabilidad, el desarrollo y la cooperación en el Mundo.

Actualmente, un número muy limitado de Gobiernos latinoamericanos sigue apoyando las tesis separatistas del polisario, respondiendo a un alineamiento puramente doctrinal que nos devuelve a tiempos pasados de la guerra fría, sin tener en consideración los factores históricos y jurídicos que atestan de la maroquinidad de las Provincias del Sur del Reino.

Mientras tanto, las Provincias del Sur marroquí constituyen hoy en día, a ojos de muchos Gobiernos, observadores y especialistas latino-americanos, uno de los vectores del desarrollo del Reino y un punto de enlace, con el continente africano y la otra ribera del Atlántico.

Antonio Yelpi Aguilar
FGAL
11 03 22